Este jueves 26 de octubre, las Madres de Plaza de Mayo llevaron adelante la Marcha N° 2376, junto al compañero Demetrio Iramain, y el ex funcionario del gobierno de Cristina Kirchner, Carlos “el Chino” Zannini. Para el cierre, escuchamos a Carmen Arias, que trajo al presente un discurso de nuestra compañera eterna, Hebe de Bonafini.

Para comenzar, Demetrio tomó la palabra y convocó a toda la militancia a seguir militando por la victoria de Sergio Massa en el ballotage del próximo 19 de noviembre. “La dimos vuelta, no más”, celebró.

Ante los cánticos de todos los presentes que vaticinan un MASSA PRESIDENTE, Demetrio advirtió “Va a ser presidente si no bajamos los brazos y seguimos militando, organizándonos, convenciendo, saliendo a la calle a hablar con nuestros compañeros, compañeras, los vecinos, como hemos hecho hasta el domingo también hacerlo hoy, toda la semana que viene hasta el 19. La batalla todavía no está terminada”, dijo.

En el mismo tono, marcó la importancia que significará la victoria de Massa en Diputados, en el Senado, “hemos logrado vencer y derrotar a esa campaña tan fuerte de los medios hegemónicos, de los grupos de poder, tendiente a instalar que ya estaba perdida la elección antes y después de las PASO. Eso pretendieron instalar. Nosotros decíamos que no y demostramos que no estaba perdida. Falta un poco más”.

Además, Demetrio felicitó al gobernador reelecto Axel Kicillof que aplastó a la fórmula de la derecha macrista y contó que es “un legítimo hijo de las Madres de Plaza de Mayo” que fue docente de economía en la Universidad Popular de las Madres antes de ser diputado. “Las Madres lo conocen de chiquito”, marcó.

A su vez, reconoció que fue Cristina la primera que dijo que el escenario electoral estaba dividido en tres tercios y el objetivo era llegar al ballotage, e “interpelar a un sector de la sociedad que esta disconforme, insatisfecho por el estado de las cosas, pero que no está dispuesto, en absoluto, a tener que descender a la reivindicación de la dictadura, a entregar las Malvinas, a la represión indiscriminada”, como propone Javier Milei y Patricia Bullrich.

“Eso es todo mérito de Cristina y tuvimos que aprenderlo, y lo aprendimos en la campaña y volvió a demostrar que tiene razón. Así que este, también es un triunfo de Cristina Fernández de Kirchner. Gracias Cristina, siempre”, dijo Iramain.

En otro fragmento, trajo al presente el recuerdo del compañero de Cristina, Néstor Kirchner, quien mañana se cumplen 13 años de su fallecimiento. “Con Néstor en nuestro corazón, en nuestra cabeza, en nuestro ejemplo”, lanzó, levantando a la militancia que cantó por el ex presidente que inició el camino que culminó en 2015 con el segundo mandato de Cristina.

“Néstor nos enseño a convertir en fortaleza lo que parecían debilidades. En convertir en potencia lo que eran condicionantes. Ese es Néstor. Y esa también fue Hebe porque la primera en verlo del campo popular, que hasta el 2003 venía en la resistencia, cortando rutas, tirándole piedras a la institucionalidad de este sistema que nos mataba de hambre, la primera en decir ‘momentito, es otra cosa’, fueron las Madres y Hebe”, cerró Demetrio y presentó al actual Procurador del Tesoro de la Nación, Carlos Zannini, “un gran amigo de Néstor y Cristina”, dijo.

En primer término, Zannini manifestó que hablar en la Plaza “es para mi una cosa muy cargada de emoción. Esta Plaza tiene el resumen de la historia de la República Argentina. En esta Plaza pasó todo, en 1810, el 17 de octubre de 1945, la primera vuelta de las Madres”, comenzó y dijo que se hace presente para agradecer la lucha de estas incansables luchadoras. “Yo voy a ir a la Plaza a agradecerles lo que han hecho por la patria, en nombre mío, porque fui víctima de la dictadura, y en nombre de los 30 mil”, indicó.

“Cuando estábamos en los peores momentos de la dictadura, sufriendo los mayores dolores, ¿Cuál era nuestra preocupación?”, preguntó Zannini y respondió, “poder construir un mundo sin tortura, y que nuestra lucha no se olvidara. Hubiera sido trágico que hubieran quedado los desaparecidos sin nadie que los rescatara y fueron estas mujeres, las que rompieron todo ese cerco que se abría, mediático, judicial. La Marcha era la que fue abriendo el camino”, reconoció y certificó que las Marchas de los Jueves “tienen enseñanza muy fuerte que no podemos ignorar”.

En ese sentido, dijo que “la primera enseñanza que extraigo, es que se puede cambiar el mundo con causas justas, y luchando por ellas. Ellas son la prueba de que se puede cambiar el mundo luchando por causas justas y esas causas, si se manejan bien, son invencibles. Y la otra cosa que enseña, es que esos proyectos que tienen de por medio suprimir al otro, hacer desaparecer o sus ideas o a las personas, o matar gente, no tienen futuro. No tienen futuro porque el amor vence al odio”, agregó levantando a la militancia.

“Desde esos pañuelos blancos se logró votar a la Argentina de una política de Derechos Humanos que hoy es admirada en el mundo, y conseguir con toda la aplicación de la ley, correcta aplicación de la ley, el castigo a los culpables. Y más que eso todavía, cuando uno visita la ex ESMA y ve lo que han hecho, y cuando se entera que hace pocas semanas el Senado de la Nación transformó en Universidad Nacional lo que era la Universidad Popular de las Madres de Plaza de Mayo no puede menos que pararse y mirar, admirado, el poder de estos pañuelos que ya tiene magia”, aseguró Zannini. “La magia de la lucha, del amor que vence al odio», completó.

Más adelante, hablo de la concentración económica, y como “el neoliberalismo para conservar esa concentración y para custodiarla, cada vez va poniendo más en tensión su relación con la democracia. La democracia tiene un origen liberal, es más se dice ‘democracia liberal’ pero los propios liberales son los que se están alejando porque aplicando sus ideas se dan cuenta que pierden apoyo en la gente y entonces quieren recurrir a la represión y el castigo para poder imponerlo. Por eso digo que hay una tensión entre el neoliberalismo y la democracia. Es necesario defender la democracia”, alertó.

“La democracia es la que nos da las herramientas para poder vencer las ideas del otro sin suprimir al otro, logrando más apoyo que lo que el otro consigue”, reflexiono y pidió que “nosotros tenemos que ser, como víctima que hemos sido de la persecución, la desaparición, el secuestro, la tortura, los mayores defensores de la democracia que permita que en un marco civilizado, con reglas de juego claras y respetadas, se pueda dirimir democráticamente, quién va a conducir el periodo que viene”, reveló y remató, “esa es la situación que tenemos hoy”.

“La lucha no es contra el negacionismo. Acá lo que se está diciendo es que estuvo bien matar, torturar, secuestrar bebes. Acá lo que están diciendo es que hay que reivindicar la dictadura. Eso no es negacionismo. Negacionismo es decir ‘no ocurrió, no me entere, como no lo vi no puedo decir que eso haya pasado’. No. Acá lo que están diciendo es que ‘están bien muertos, bien secuestrados, bien torturados’. Esa es la idea que tenemos que erradicar con votos de la política argentina”, repasó.

En este punto, pidió que la militancia debe buscar “el sueño, la aspiración que, así como los juicios fueron asumidos por los tres poderes y la sociedad, también la sociedad asuma que no se puede hacer desaparecer al otro para ganar una elección. Tenemos que entender que esta es una tarea de discusión para ver quién tiene la iniciativa política, manejando los mecanismos del Estado, y nosotros, además, en nuestro carácter de peronistas, de defensores de las luchas populares, tenemos que agregarle a esa democracia que sirva para el bienestar de nuestro pueblo”, reflexionó.

“Es necesario que asumamos la defensa de la democracia con nuestros cuerpos, ante los que vienen a suprimir, a extinguir con odio, en lugar de venir con amor. Las Madres me sirven de ejemplo para esto, el amor vence al odio. Esperemos que este 19 de noviembre el amor venza al odio”, concluyó Zannini entre aplausos.

Llegando al final, tomó la palabra Carmen Arias, quien trajo al presente un discurso que Hebe brindó en 2014, cuando el Congreso de la Nación convirtió a la Universidad Popular Madres de Plaza de Mayo en Instituto Nacional. En ese marco, Hebe reflexionó a partir de un texto de Eva Duarte de Perón donde hace referencia a los “fanáticos”.

“Así, fanáticas quiero que sean las mujeres de mi pueblo. Así, fanáticos quiero que sean los trabajadores y los descamisados. El fanatismo es la única fuerza que Dios le dejó al corazón para ganar sus batallas. Es la gran fuerza de los pueblos: la única que no poseen sus enemigos, porque ellos han suprimido del mundo todo lo que suene a corazón. Por eso los venceremos.

Ellos tienen dinero, privilegios, jerarquías, poder y riquezas no podrán ser nunca fanáticos. Porque no tienen corazón. Nosotros sí.

Ellos no pueden ser idealistas, porque las ideas tienen su raíz en la inteligencia, pero los ideales tienen su pedestal en el corazón. No pueden ser fanáticos porque las sombras no pueden mirarse en el espejo del sol. Frente a frente, ellos y nosotros, ellos con todas las fuerzas del mundo y nosotros con nuestro fanatismo, siempre venceremos nosotros”, leyó Carmen y completó con palabras de Hebe.

“No es malo ser fanático, para nada es malo. Sin fanatismo, sin amor, y sin fuerza, no hay nada. El día que se cansen de pelear, chicos, quédense en sus casas. Y cuando digan ‘estoy cansado porque hoy trabajé mucho’. Bueno, sepan que nadie se puede cansar de luchar porque es como cansarse de respirar.

Las Madres vamos a seguir poniendo lo mejor que tenemos para que nuestros hijos sean para ustedes un espejo. Pero también, porque nuestros hijos sean sus propios compañeros. Nuestros hijos no están muertos, están en ustedes”, leyó Carmen.

“Gracias Hebe, también están nuestros hijos en la potente militancia que construyó con su esfuerzo y entrega el gran triunfo electoral del domingo pasado. Una vez más, el pueblo demostró que la única lucha que se pierde es la que se abandona”, cerró la Madre de Plaza de Mayo.

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