La marcha de todos los jueves convocada por las Madres de Plaza de Mayo contó con la participación de Nehuen Raiquén Sosa, Secretario Ejecutivo del Consejo Provincial de Asuntos Indígenas, y de Agustín Bruera, y Demetrio Iramain del SITRAJU (Sindicato de Trabajadores Judiciales).
Hebe de Bonafini, presidenta de la Asociación Madres de Plaza de Mayo: “Los derechos humanos no se pueden festejar, los derechos humanos están hechos para defenderlos, y para ponerlos en práctica”
La dirigente comenzó su discurso contando que el presidente Alberto Fernández la había llamado para felicitarla por su cumpleaños, el pasado sábado 4, y que ella aprovechó la comunicación para aclararle que las Madres no iban a participar del acto convocado por el gobierno. El viernes 10 de diciembre se conmemora la restauración de la democracia en nuestro país, y el día de los derechos humanos, estos son dos de los motivos de la convocatoria oficial. “Los derechos humanos no se pueden festejar, los derechos humanos están hechos para defenderlos, para ponerlos en práctica, y las Madres los llamamos derecho a la vida. Nos gusta más, porque se ha bastardeado tanto el concepto que preferimos llamarlo derecho a la vida”. Y a la vez, ratificó que “mientras haya un solo preso político, un solo hombre, una sola mujer que viva en la calle, mientras se siga matando a los pobres por la espalda (y nadie salga a reclamar), mientras que en los barrios no haya agua, ni cloacas, mientras tengamos al 40 por ciento de la población desamparada bajo la línea de la pobreza, las Madres no vamos a ir a ninguna marcha ni para festejar la democracia ni para festejar los derechos humanos”.
Por otro lado, Hebe aseguró que cuando apareció la democracia, se dijo que era igualdad para todos. “Acá la democracia existe para la clase media, y la clase alta, que son las clases que le interesan al Presidente”. Cuestionó también que Alberto Fernández durante un acto en la Iglesia de la Santa Cruz negara la teoría de los dos demonios, y a la vez recomendara la lectura del libro “Nunca más”. “Sr. Presidente el “Nunca más” tiene un prólogo que sostiene la teoría de los dos demonios. Néstor Kirchner lo había cambiado, y Macri volvió a poner el original. Lo cierto es que ese libro con esa versión está en las escuelas y universidades.”
En otro momento de su discurso expresó: “hay muchas cosas para reformar, y transformar; los jueces, el poder judicial y la Suprema Corte. Ellos son corruptos, chorros, ladrones, tendrían que estar todos presos, y a la vez, sigue habiendo un montón de gente procesada sin condena”. Un reciente informe de la Procuraduría de Violencia Institucional (Procuvin) estima
que más del 50 por ciento de los detenidos por el Servicio Penitenciario no tienen condena firme. Ante esta evidencia Hebe de Bonafini se preguntó: “¿Por qué no está preso Macri? ¿Por qué no están presos los responsables de Vicentín? Porque son amigos del Presidente –respondió-. Mal que nos pese son amigos de él. A nosotros no nos va a engañar con un discurso armado, y organizado para estos días, no nos va a convencer con un gran escenario para que nos diga cómo hay que defender los derechos humanos, porque nosotros ya lo sabemos. No hay nada para festejar, no tenemos ganas de aplaudir a un presidente que no nos dice la verdad”.
Para cerrar su participación anunció que “las Madres estamos trabajando para que los compañeros de todas las etnias tengan tierra, y agua. Estamos viendo cómo hay que hacer. No queremos leyes que después no se cumplan, queremos que se cumplan y si hay una deuda con los pueblos originarios es esa: la tierra y el agua”.
Nehuen Raiquén Sosa, Secretario Ejecutivo del Consejo Provincial de Asuntos Indígenas (CPAI):”Hacemos todos los días el esfuerzo para que un mundo mejor exista, y sea posible. La victoria será nuestra».
Sosa, en representación del Consejo, entregó a las Madres de Plaza de Mayo una serie de emblemas y obsequios de los pueblos coya, guaraní, tehuelche, y mapuche. Dijo que se sentía muy emocionado por estar frente a las Madres, y que nunca había soñado con un encuentro como ese. Sin embargo, reconoció que su vida cambió cuando conoció a Hebe. “Tenía 11 años, y marcaste mi rumbo, mi camino, mis ideales, mis convicciones y espero nunca apartarme de ellos. Para mí significa muchísimo la lucha de los 30 mil, de mis compañeros, de mis compañeras, y seguir luchando. día a día. por un mundo mejor. Hacemos el esfuerzo para que ese mundo mejor exista, y sea posible. La victoria será nuestra».
El representante del CPAI consideró además que “la región está atravesando momentos muy difíciles. Cuando matan a un mapuche, a un guaraní, a un hermano qom, los derechos humanos no existen en esas provincias. Nosotros velamos día a día porque los derechos humanos sí existan para todas las personas, para que todas las personas tengan acceso a una educación digna, a una salud digna, para que puedan tener acceso a un trabajo digno, y para que no se nos discrimine más a los pueblos originarios, a los pueblos indígenas de América latina”
Agustín Bruera, secretario general del SITRAJU (Sindicato de Trabajadores Judiciales): “Los derechos humanos no se garantizan sin la democratización del servicio de justicia”
El dirigente gremial comenzó su discurso en la Plaza teniendo en cuenta que el 10 de diciembre se conmemoran 38 años de la recuperación de la democracia, y que es el día de los derechos humanos. Aunó ambos conceptos para vincularlos con la actual situación del poder judicial. Bruera consideró que luego de la dictadura cívica militar no hubo ni autocritica, ni reforma, ni democratización dentro de las filas de los funcionarios judiciales. Eso hace que “no se pueda decir que en este país los derechos humanos se estén garantizando plenamente porque los jueces tienen los mismos intereses que la derecha, defienden a los que más tienen, persiguen compañeros, arman una mesa judicial para perseguir políticamente, judicialmente y hasta con la cárcel a todo aquel que piense en favor del pueblo”. Recordó que cuando “Cristina Fernández de Kirchner, allá por el 2013, planteó una reforma, los jueces hacían paro para que esta reforma no avance”.
Agustín Bruera del SITRAJU ratificó, también, el compromiso del sindicato que dirige con la transformación del poder judicial. “Tenemos la responsabilidad de tener un poder judicial que sea accesible para todos y todas, un poder judicial que tenga un ingreso democrático y que no sea digitado por las familias patricias para imponer sus intereses”.