A poco más de una semana de un nuevo aniversario del golpe cívico militar, las Madres se hicieron presentes en la Plaza, como lo hacen de manera ininterrumpida hace 2031 jueves. Aunque esta vez no fue un jueves como los demás: desde la jornada anterior varios amigos de las Madres se habían comunicado expresando la sorpresa e indignación causada por la aparición de seis pesadas estructuras de cemento que sostenían una serie de afiches con la “historia” de la Plaza de Mayo.
En el mismo lugar en donde se realiza la marcha y encima de los pañuelos.
Ante esto, las Madres decidieron acudir más temprano a la cita sin saber que se encontrarían con un móvil policial que cerraba el paso en la intersección de las calles Bolívar e Hipólito Yrigoyen, paso obligado para el ingreso de las Madres a la Plaza. Hebe de Bonafini le dijo a los efectivos policiales que abrieran el paso o que las Madres pasarían igual: los agentes permitieron el paso.
Una vez en la Plaza, trabajadores de la Asociación y militantes que ya estaban allí, se dispusieron a mover estas estructuras que pretendían detener lo que las Madres hacen desde hace 40 años: marchar alrededor de la Pirámide de Mayo. No sin esfuerzo –hizo falta la fuerza de varios compañeros– quitaron del medio esta vergonzosa provocación que mancillaba los pañuelos e impedía el paso, por lo que, posteriormente, la marcha se realizó como cada jueves.
Más tarde, en el espacio de La Hormiguita Colorada, hicieron uso de la palabra Demetrio Iramain, periodista y director de la revista Ni un paso atrás; y la presidenta de la Asociación, Hebe de Bonafini.
Iramain, remarcó algo que el partido de gobierno parece haber olvidado: “Hace 40 años que las Madres de Plaza de Mayo ocupan esta plaza”, expresó. El periodista apuntó su mirada hacia la antigua sede de gobierno municipal y advirtió al actual Jefe de Gobierno, responsable político de la provocación, y secuaz del presidente Macri: “Escuchá bien, Larreta. 40 años; hace 40 años que las Madres marchan en esta Plaza”.
Antes de entregar el micrófono a la presidenta de la Asociación, Iramain remarcó la importancia de la lucha y el ejemplo que brindan las Madres que hacen que “cada vez sean más los que se animan a salir a luchar a la calle”. Para cerrar dejó en claro que “la plaza, los jueves a las 15.30hs no se toca, es un trinchera que ya pertenece a la clase trabajadora y al pueblo argentino”.
En tanto, Hebe de Bonafini, descargó su bronca ante una nueva provocación hacia las Madres y narró detalles de lo sucedido: “Ayer nos habían llegado rumores de que habían puesto estos monolitos en la Plaza, esta mañana también. Y al mediodía me llamaron de una radio para decirme que estaban. Cuando vinieron los compañeros del puesto de las Madres no los dejaron pasar, había un operativo policial, todos los alrededores cerrados, con prepotencia. Llegamos las Madres, estaba cortada la esquina de Yrigoyen y Bolívar con una tiras. Yo tenía una tijera en el bolsillo que me había dado otra Madre y le dije al policía ‘o abrís o cortamos la tira’. Y abrieron. Esto viene bravo. A las Madres de Mendoza ya les quitaron la Plaza. La cerraron un día. Las Madres ya han hecho juicios, marchas alrededor. Quieren mandarlas a otra Plaza, pero no se van a ir. Esto son señales muy fuertes”.
“A Rodríguez Larreta, otro polenta polenta (la manera que usa Hebe para que no le censuren los insultos en el programa de la TV Pública), le agarró el berretín de remodelar la Plaza y la remodela ensuciando los pañuelos. Rodríguez Larreta, la polenta de tu madre. ¡Los pañuelos de las Madres no se tocan! Arriba de cada pañuelo pusieron un monolito que diez personas no lo podían mover. Pero como vinimos con unos cuantos compañeros los arrastramos con unos cuantos compañeros y los corrimos al borde de la Plaza”, narró.
También sostuvo: “La historia no se escribe tapando pañuelos, la historia se escribe llevando a la cárcel a todos los responsables de la desaparición de nuestros hijos. Cuando tapan los pañuelos es porque le tienen miedo. Lo tapan porque no quieren ir a la cárcel, porque ellos también fueron grandes responsables de las torturas y las muertes. Tienen que pagarla: los Macri, los Rodríguez Larreta, los Bullrich. Todos los que están en el gobierno”.
Bonafini advirtió, además, que no permitirá que sigan provocando a las Madres: “A Macri y Larreta les aviso una cosa: si a las Madres nos quieren sacar de la Plaza, yo, Hebe de Bonafini, les vuelo la Casa de Gobierno. No me importa que me maten. Que no me digan que soy violenta porque ellos nos están violentando, ensuciando y difamando. Las Madres nunca hemos hecho ningún acto de violencia, pero que paren la mano de verdad, no jodan con las Madres.
Ellos torturaron hasta el final a nuestros hijos e hijas y los mataron y no quieren pagar por lo que hicieron. Destrozaron nuestros hogares y nosotras llevamos 40 años peleando sin emplear ningún tipo de violencia, solamente en la Plaza, pero en que no nos jodan en el final de nuestras vidas porque ensuciar los pañuelos es ensuciar a los desaparecidos más que a las Madres y eso no lo vamos a permitir”.
Por último, se permitió expresar su solidaridad con los maestros, que resisten el ajuste: “Les quiero mandar el abrazo más grande, nos parece fantástica la lucha de los maestros. Baradel, diez puntos. Cada vez está más firme. La Vidal extorsiona con mil pesos a los carneros traidores. Como ella es una carnera, piensa que todos los compañeros van a ser igual. Se los va a tener que meter en el culo. No tiene plata para los maestros, pero sí para los carneros. Lo que más me preocupó es que mandaron a la Bonaerense a identificar a los ‘maestros K’. ¿Qué es esto? ¿Quieren que sean todos del PRO?”, concluyó.