Desde el primer momento, las Madres de Plaza de Mayo se mostraron solidarias con las madres de los soldados que estaban combatiendo en las Islas Malvinas aunque no dejaron de subrayar que la contienda era utilizada por la Junta para tapar lo que ocurría en el país.
Por eso decidieron lanzar la consigna: “LAS MALVINAS SON ARGENTINAS, LOS DESAPARECIDOS TAMBIÉN”.
A continuación, fragmento de “La rebelión de las Madres: historia de las Madres de Plaza de Mayo”, de Ulises Gorini:
(…) Los desaparecidos también
Fue allí, en la Plaza, donde nació la consigna. Como siempre, las marchas de los jueves eran también el ámbito de conversaciones y debates que, en esta ocasión, giraban en torno a la guerra. Pero a diferencia de la mayoría de los argentinos, a las Madres les inquietaba un problema especial que les planteaba el discurso hegemónico: encontrar la forma de expresar que la protesta contra las violaciones a los derechos humanos seguía siendo tan legítima como antes y que no debía ser postergada por más grave que fuera la situación. Porque, precisamente, la presión oficial exigía aplazar cualquier demanda en pos de la unidad necesaria para la reivindicación de la soberanía sobre las islas.
De pronto, durante una de esas marchas, una madre dijo: “Sí, las Malvinas son argentinas, y los desaparecidos también”. No lo dijo gritando, ni siquiera tuvo la intención de formular una frase especial, estaba sencillamente expresando en forma sintética su pensamiento. Pero las que la rodeaban dijeron: “Ahí está, ésa es la consigna, ‘Las Malvinas son argentinas, los desaparecidos también’.” Como por arte de magia, aquellas palabras parecieron abrirles el camino para resolver la compleja trama de contradicciones en las que se veían enredadas. Y, en verdad, la consigna jugaría un papel decisivo durante ese traumático período. Ésa fue la fórmula con la que las Madres intentaron resolver las múltiples tensiones internas y externas que las atravesaban. Porque ellas no estaban al margen de las ideas y creencias que envolvían al resto de las fuerzas políticas y sociales. (…)