La presidenta de la Asociación Madres de Plaza de Mayo, Hebe de Bonafini, se reunió, este martes por la tarde, con legisladores de la Ciudad de Buenos Aires, y senadores y diputados provinciales, quienes apoyan la Marcha de la Resistencia que se realizará el 26 y 27 de agosto en Plaza de Mayo bajo la consigna “Por el derecho a trabajar, resistir sin descansar. Cristina conducción”.
La actividad se iniciará el próximo viernes 26 de agosto a las 17 horas en Plaza de Mayo y tendrá su cierre el sábado 27, a la misma hora, cuando comenzarán los discursos de cierres.
Los legisladores tuvieron la posibilidad de escuchar de boca de Hebe las características de la marcha, su historia y su objetivo, como así también algunos lineamientos para llevarla a cabo, además de algunas posturas históricas que definen a la Asociación.
Hebe comenzó narrando ciertas definiciones estratégicas de la organización: “La reparación económica fue una ley sancionada durante el gobierno de Alfonsín: 275 mil dólares por cada hijo desaparecido. Pero vos tenías que poner en la planilla que firmabas qué día creías que había muerto tu hijo: te lo hacían matar a vos misma. Ahí empezó una discusión muy fuerte. Nosotras, un grupo grande, dijimos que no íbamos a aceptar que se ponga precio a la vida de los hijos. La vida de un ser humano sólo vale la vida de otro. Fuimos el organismo que rechazó la reparación económica”, sostuvo. “Además socializamos la maternidad: somos Madres de los 30.000 y de todos los que luchan”, agregó.
En relación al ritual de la Plaza, en donde las Madres marchan cada jueves, expresó: “Cuando llegamos a la Plaza se produce un encuentro tácito con nuestros hijos, no es mística, es una cosa que se siente de verdad”.
Por otra parte, la Presidenta de la Asociación, hizo hincapié en las características de la Marcha de la Resistencia: “Es momento de poner en práctica la solidaridad. Esta Marcha de la Resistencia es en solidaridad por la gente que no tiene trabajo o está por perderlo. Vamos a caminar 24 horas por ellos”.
“Les agradezco que vengan, que difundan la Marcha y que la sientan en el cuerpo. La Marcha hay que sentirla: pensar que estoy caminando por los compañeros que no tienen trabajo, que no tienen para comprar pañales, que no tienen comida. Nos lo tenemos que meter en la cabeza y en el cuerpo. Hay que convocar con ese sentimiento y esas ganas”.
Por último, varios legisladores tomaron la palabra para expresar sus sensaciones, ponderar el valor de la reunión y para reafirmar que participarán activamente de la actividad.