La Universidad de las Madres volvió, después de muchos años, a ser la esencia germinal buscada.
Después de las usurpaciones elocuentes, en las que no solo se borró la historia de las Madres, sino las ideas de liberación de una generación diezmada, y se forzó a entrar por la fuerza pública para despojar el archivo histórico de los pueblos de la región, sabemos bien quienes acompañaron públicamente y con el cuerpo la defensa de esa historia, que es la de todxs.
No culpamos a nadie, pero si exigimos respeto y apoyo a las autoridades y al Rector del instituto a quienes elegimos para el destino del mismo y quienes además están abiertos a todo dialogo. Resulta insólito todo reclamo cuando no se está actuando ilegalmente ni ofendiendo.
Todos los que ingresaron por la ventana y tienen virtudes humanas, les aseguramos que ingresaran por la puerta grande de la universidad, pero no lo harán, por su propio enredo personal, quienes sigan atentando contra una educación para la libertad, que es la que soñamos las Madres.
Hebe de Bonafini
Presidenta Asociación Madres de Plaza de Mayo