Este jueves 18 de junio, la Marcha Nº 2201 de las Madres de Plaza de Mayo, una vez más se dio a través de las redes, debido al aislamiento obligatorio por la pandemia de coronavirus. En esta oportunidad, las palabras de la presidenta de la organización, Hebe de Bonafini, tuvieron la introducción de Demetrio Iramain y el periodista Carlos Polimeni.
Demetrio Iramain se refirió a la carta recibida por las Madres de parte de la Universidad Autónoma de Santo Domingo, de la República Dominicana, otorgándole a Hebe de Bonafini el título de Doctora Honoris Causa como activista argentina y presidenta de la Asociación Madres de Plaza de Mayo, fundamentado en “el reconocimiento a la lucha por el esclarecimiento de la verdad respecto a sus hijos, víctimas de un régimen genocida, la reivindicación de los 30 mil detenidos desaparecidos durante la última dictadura militar argentina y la incansable búsqueda de las Madres de Plaza de Mayo para que no se pierda la memoria en nuestra América Latina”.
Carlos Polimeni recordó el encuentro del cantautor misionero Ramón Ayala, autor de El Mensú, con Ernesto Che Guevara en Cuba en 1962. Allí el Che le contó que esa canción había sido entonada en los fogones revolucionarios de Sierra Maestra. Polimeni dedicó el recuerdo de esta historia a las Madres, pronunciando el concepto “que las Madres enarbolaron, y que nace de una lógica del Che: ‘Hay que endurecerse sin perder la ternura’. Ustedes, Madres, lo hicieron”
Hebe de Bonafini una vez más convirtió su cocina en la Plaza. Para decir sus palabras de cada jueves. En este caso para transmitir su preocupación, para decir, denunciar y gritar las injusticias y las desigualdades que se siguen reproduciendo.
Hebe dirigió su denuncia en primer lugar al jefe de Gobierno de la Ciudad de Buenos Aires: “Estamos muy preocupadas con esta enfermedad, que la gente no se cuida, que sale a la calle, no les importa nada. A mí me preocupa que todo gira en torno a Vicentin: la plata que se robaron, cómo se les va a hacer el juicio, si se va a expropiar o no; en torno al tema de la investigación por el espionaje; pero resulta que nadie le hace juicio a Larreta y a Santilli. Y ellos han cometido muchos crímenes. Primero porque pidieron mucho dinero a la organización Mundial de la Salud para poner el agua en las villas y nunca la pusieron”.
“Larreta no es nuestro amigo, ni compañero, ni se parece a nosotros. Larreta es un enemigo que usted, señor presidente, tiene sentado a su lado a veces, no sé si porque le parece mejor así. Pero a mí lo que me parece es que Larreta a usted le dice una cosa, y después hace otra”.
“Todos los contagios mayores ahora son culpa de Larreta, porque abandonó a los barrios”.
“Ahora me entero que para los mal llamados ‘niños de la calle’ hay refugios, que son lo peor, sucios, desprotegidos. Se han muerto pibes. Porque se contagiaron. Porque duermen amontonados. ¿Alguien habló de esos chicos? ¿Salió en algún lado? Esos chicos de la calle, que no tienen ni nombre ni apellido, ni mamá ni papá. La calle no puede parir hijos. Nosotros los parimos a la calle. Nosotros no les damos una oportunidad. Nosotros que a veces los miramos con mala cara porque pensamos que a lo mejor nos roban. Sí, capaz que te pueden robar, yo no digo que no. ¿Pero no les robamos primero nosotros a ellos? ¿No les robamos la esperanza y los sueños de un niño que no pudo jugar, no pudo aprender a leer y escribir, que tuvo que salir a buscarse la comida como pudo porque en su casa no lo podían mantener? Y ahora se mueren como perros, solos, en un refugio, sin que nadie se ocupe de ellos”.
“¿Quién le va a hacer juicio a Larreta y a su cría?, insistió. “Nadie habla de hacerle un juicio. Parece que es como Dios, intocable. Tiene mucha plata, para pagar a los periodistas, para dar subsidios para que todos se callen”.
Hebe recordó también que ayer se cumplió un mes que se murió Ramona Medina, la vocera de La Poderosa: “Nacieron un montón de Ramonas ahora, a partir de ella. Pero ¿por qué nacen estas mujeres? Porque no hay agua”.
Señaló a su vez otra de las denuncias que se vienen haciendo sobre la comida que llega a las escuelas y a los barrios: “Al principio parecía pasable. Al poco tiempo se empezaron a quejar los maestros de que había sido reducida, a tal punto que les daban un sanguchito con un pedazo de fiambre en mal estado y una tajada de manzana. Ahora llegó al escándalo de que la comida viene podrida. Y las bolsitas que llegan a los barrios –porque no son bolsones- tienen comida vencida. ¿Cómo puede ser que nadie piense en hacerle un juicio a esta gente?”, volvió a remarcar.
“¿Cómo puede ser que le sigamos permitiendo que él haga lo que quiera, que salga la gente a correr, que él salga a correr, que se reúna con todos?”
“Usted, señor presidente, dijo que si no cumplían los gobernadores, los iba a hacer cumplir. Pero resulta que a Larreta no lo hace cumplir. Larreta no quiere volver al principio. ¿Y nos vamos a contagiar todos por culpa de Larreta? Él se está disputando la candidatura, a costillas de la salud y la vida de la gente”.
“Mucha plata que él pidió para las villas y los barrios, para agua, viviendas, calles, ambulancias, no la gastó nunca en ellos. La gastó haciendo plazoletas inventadas, piletas de natación que no existen, hamaquitas, sillitas de colores para el verano. Nunca para los pobres, nunca para la gente de los barrios, nunca para las villas”.
Resaltó también la situación de los geriátricos, “totalmente abandonados. Nadie se preocupa, no hay un reglamento, no hay una inspección para ver qué comen, cómo los tratan, si se bañan, si están limpios”.
“Y en los psiquiátricos ¿cuántos se han contagiado y cuántos se han muerto? Se oculta, se tapa. Porque han reclamado los trabajadores, que no tienen las mínimas condiciones para estar cuidando a esos enfermos. Porque Larreta lo que quiere es cerrarlos y usar ese lugar para hacer vaya a saber qué negocio”.
Recordó que hace pocos días “se murió un hombre que vivía en la calle, esperando que lo vengan a buscar. Tenía síntomas y nadie lo fue a buscar. Total, ¿quién va a pedir por él?”
“No quiero un país así, que tengamos que seguir pidiendo porque los mapuches están abandonados, los wichís están abandonados. Son compañeros nuestros. No quiero más viejos abandonados, niños de la calle”.
“Quiero que de una vez por todas sea verdad que estamos ocupados y preocupados por los viejos, por los niños que no son de la calle, son nuestros, por los mal llamados locos y locas, por los compañeros y compañeras de las distintas etnias, también abandonados”.
“Nunca llegamos al fondo de la cuestión: a los nadie”.
“Tenemos mucho que hacer. Todos nos tenemos que sentir responsables. No como Larreta. Tenemos que sentirnos responsables de no hablar, de no gritar, de no decir. No tengamos miedo de hablar. Pongamos nuestras vidas al servicio de los que no tienen voz, de los que no pueden gritar, ‘me mataron y no puedo gritar’, esa familia que no sabe cómo hacer, porque le mataron sus hijos y no sabe cómo hacer”.
“Estoy triste y ya no sé cuánto más gritar, cuántas veces pedir socorro, a quién pedirle socorro. Parece que Dios tiene mucho trabajo, y va un poquito a cada lado, y acá hace rato que nos abandonó. Eso es lo que pienso. Cuando uno clama y pide por él, no está. Y saben cuánta gente hoy que no puede comer y no tiene agua piensa dónde está Dios”.